LA COMIDA

EL ALMUERZO

Por fin voy a hacer hueco aquí para hablar de los muchachos. La comida fue en el Restaurante Mamá Margarita, bastante sabrosa (arroz con setas de primero; carne de ternera con zanahorias cocidas y salsa especiada de segundo; y fruta de postre; aderezado todo con agua natural y gaseosa).

Ya son muchos días juntos, comiendo pasta, pasando un poco de hambre los que quieren. El Dortmund eliminó al Madrid, el Bayern hizo otro tanto con el Barça. Estos madridistas y culés entre enamoramientos y decepciones deportivas han cambiado. En realidad todos hemos cambiado.

En primer plano se ve a DIEGO. Bueno, nuestro venezolano está con un poco de menos pelo, pero mantiene su buen humor. Aquí ya se ha hecho imprescindible. Nos divertimos con él. Es importante para soportar el día a día. Hace pareja laboral con JORGE. Existe un video que estoy intentando incorporar al blog sobre cómo ha perdido su melena.

Detrás está YULIANA. Que no se preocupen en casa, estoy haciendo todo lo posible para que no pase hambre. La pasta es lo que tiene, o te gusta o la aborreces. Está siendo toda una campeona, aguantándonos al resto con la adversidad añadida de reacciones alérgicas, sueño y cansancio acumulado.

Luego, ELENA. Estamos intentando controlar ese carácter, va por días, unos más animada, otros algo menos. También está demostrándose que puede adaptarse a circunstancias distintas. Come bien y duerme a ratos. La pobre se cansa de mis continuas charlas. Espero que ya en Madrid no me ponga en la lista negra de consejeros pesados.

GUSTAVO, al fondo, es el espectáculo. Algún día, cuando cuente en casa cómo consiguió relacionarse con el grupo de Pinardi y cómo logró compilar afinidades, les ruego que me lo hagan saber. Es sensible, pero cuando se enfada, también lo hace de corazón y es un enfado visceral, tan sincero como su amistad lo es.

A la derecha, JORGE. Habla poco, pero cuando abre la boca sube el pan. Su familia tiene que estar orgulloso de él, está respondiendo con ilusión a una prueba de fuego. Participa en las excursiones y paseos con vivacidad. Es un experto en esto del futbolín y le estoy sufriendo, pelotazos incluidos, cada tarde en la que disponemos de algo de tiempo libre.

En frente, ISMAEL. Resuelto, autónomo, eficaz. Tiene la cabeza en su sitio. Espero y deseo que así sea hasta el final. Me come bien, duerme a gusto en la habitación de oficiales, insólito privilegio, y sus profesores ya me han hecho saber su buena predisposición. Se merece estar aquí y sería muy bueno para él que estas prácticas se convirtiesen en un trampolín de lujo de cara al futuro laboral.

¡¡¡¡¡TODOS OS ECHAMOS DE MENOS, PERO ESTAMOS VIVIENDO UNA EXPERIENCIA ÚNICA!!!!!